Los protocolos de Fitoterapia permitirán estandarizar el servicio de consulta y recomendación que ofrecen los farmacéuticos a los pacientes

 

  • Los productos basados en plantas medicinales son cada vez más demandados por los pacientes  para paliar pequeños trastornos y problemas cotidianos
  • La farmacia puede convertirse en un centro de referencia gracias a la formación y recursos puestos a disposición de los profesionales, para maximizar la eficacia y seguridad de la recomendación terapéutica

 

Barcelona, 22 de marzo de 2019.- Según un estudio del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), 7 de cada 10 españoles que toman plantas medicinales lo hace para prevenir o tratar diversos trastornos de manera habitual. La fitoterapia es una de las ramas importantes dentro del sector farmacéutico y por eso se ha impulsado la creación de protocolos que guíen la actuación de los profesionales. Este fue el tema central del Aula Profesional “Protocolos de fitoterapia para una actuación eficaz”, moderada por María José Alonso, farmacéutica y diplomada en Fitoterapia.

José López, vocal de Plantas medicinales y Homeopatía del COF de la Región de Murcia, señalaba que “la integración de la fitoterapia en la práctica profesional va en beneficio de los criterios de calidad, eficacia y cercanía de los farmacéuticos”. El objetivo de los protocolos es que sirvan de formación y guía, estandarizando así el servicio de consulta y recomendación que ofrecen. De este modo, tal y como expuso Gema Pons, vocal de Fitoterapia y Homeopatía del COF de Tarragona, se da respuesta a la demanda del paciente “que solicita el remedio más adecuado para resolver un problema de salud concreto”.

Los protocolos se están construyendo con el trabajo colaborativo de los colegios de farmacéuticos de toda España, a través de grupos de trabajo. El contenido e información se basa en las monografías existentes, como las de la ESCOP (European Scientific Cooperative On Phytotherapy), que contienen muchos datos clínicos. También recogen información de la Agencia Europa del Medicamento (EMA) y otras fuentes oficiales o contrastadas.

Dos grandes bloques: evaluación del paciente y elección del producto más adecuado

Aunque el objetivo es que los protocolos tengan una versión sencilla y accesible, que pueda estar en el mostrador de la oficina de farmacia, todavía queda por definir su formato definitivo.  Sí que se ha estructurado su contenido en dos grandes bloques. El primero constará de una fase de evaluación del paciente (con su derivación al centro de salud o no) y el análisis de los tratamientos farmacológicos recomendables en cada caso.

Una vez que se ha pasado por estos primeros pasos y opta por el artículo fitoterapéutico, la segunda fase se centrará en elegir el producto más adecuado en cada caso, teniendo en cuenta el principio activo, el formato de aplicación, la dosis recomendada y las características específicas del paciente. “Las plantas son nuestro ámbito de acción, una gran mayoría de medicamentos derivan de los principios activos de las plantas y tenemos que recuperar ese conocimiento que ya teníamos y sobre el que ahora existe una mayor demanda por parte de la sociedad”, recordó Pons al final de su intervención.

Josep Allué, vocal de Plantas Medicinales y Homeopatía del COF de Barcelona, también hizo hincapié en la importancia de que las oficinas de farmacia conozcan la oferta del mercado y la adapten a sus preferencias y las de sus pacientes sin descuidar la seguridad y la calidad.

 Los productos basados en plantas medicinales son cada vez más demandados por los pacientes  para paliar pequeños trastornos y problemas cotidianos
La farmacia puede convertirse en un centro de referencia gracias a la formación y recursos puestos a disposición de los profesionales, para maximizar la eficacia y seguridad de la recomendación terapéutica

 

Barcelona, 22 de marzo de 2019.- Según un estudio del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), 7 de cada 10 españoles que toman plantas medicinales lo hace para prevenir o tratar diversos trastornos de manera habitual. La fitoterapia es una de las ramas importantes dentro del sector farmacéutico y por eso se ha impulsado la creación de protocolos que guíen la actuación de los profesionales. Este fue el tema central del Aula Profesional “Protocolos de fitoterapia para una actuación eficaz”, moderada por María José Alonso, farmacéutica y diplomada en Fitoterapia.

José López, vocal de Plantas medicinales y Homeopatía del COF de la Región de Murcia, señalaba que “la integración de la fitoterapia en la práctica profesional va en beneficio de los criterios de calidad, eficacia y cercanía de los farmacéuticos”. El objetivo de los protocolos es que sirvan de formación y guía, estandarizando así el servicio de consulta y recomendación que ofrecen. De este modo, tal y como expuso Gema Pons, vocal de Fitoterapia y Homeopatía del COF de Tarragona, se da respuesta a la demanda del paciente “que solicita el remedio más adecuado para resolver un problema de salud concreto”.

Los protocolos se están construyendo con el trabajo colaborativo de los colegios de farmacéuticos de toda España, a través de grupos de trabajo. El contenido e información se basa en las monografías existentes, como las de la ESCOP (European Scientific Cooperative On Phytotherapy), que contienen muchos datos clínicos. También recogen información de la Agencia Europa del Medicamento (EMA) y otras fuentes oficiales o contrastadas.

Dos grandes bloques: evaluación del paciente y elección del producto más adecuado

Aunque el objetivo es que los protocolos tengan una versión sencilla y accesible, que pueda estar en el mostrador de la oficina de farmacia, todavía queda por definir su formato definitivo.  Sí que se ha estructurado su contenido en dos grandes bloques. El primero constará de una fase de evaluación del paciente (con su derivación al centro de salud o no) y el análisis de los tratamientos farmacológicos recomendables en cada caso.

Una vez que se ha pasado por estos primeros pasos y opta por el artículo fitoterapéutico, la segunda fase se centrará en elegir el producto más adecuado en cada caso, teniendo en cuenta el principio activo, el formato de aplicación, la dosis recomendada y las características específicas del paciente. “Las plantas son nuestro ámbito de acción, una gran mayoría de medicamentos derivan de los principios activos de las plantas y tenemos que recuperar ese conocimiento que ya teníamos y sobre el que ahora existe una mayor demanda por parte de la sociedad”, recordó Pons al final de su intervención.

Josep Allué, vocal de Plantas Medicinales y Homeopatía del COF de Barcelona, también hizo hincapié en la importancia de que las oficinas de farmacia conozcan la oferta del mercado y la adapten a sus preferencias y las de sus pacientes sin descuidar la seguridad y la calidad.  COFB.ORG

Desplaça cap amunt