La Federación Española de Sociedades de Nutrición (FESNAD) celebra el 28 de mayo el XIV Día Nacional de la Nutrición dirigido a destacar la importancia de seguir una alimentación saludable para la mujer embarazada y en período de lactancia. Es por eso que el Colegio ha organizado este mediodía una conferencia dirigida a los farmacéuticos sobre el uso de los complementos de la alimentación en estos períodos, y en la que se ha dado respuesta a las consultas y dudas que llegan a la farmacia.
El acto ha ido a cargo de Francisca Molero, ginecóloga y sexóloga, directora del Instituto Iberoamericano de Sexología, directora del Instituto de Sexología de Barcelona y coordinadora del Máster de Sexología Clínica y Salud Sexual (UB), y ha sido moderado por Anna Bach, vocal de Alimentación y Nutrición del COFB.
Es importante saber que la alimentación de la madre, incluso desde antes de la gestación, desempeña un papel fundamental para favorecer un mejor estado de salud materno-infantil.
Unos hábitos de vida saludables, además de una dieta adecuada y un adecuado control de la gestación, son importantes para conseguir un buen pronóstico en el embarazo y la lactancia. Así, una buena alimentación ayuda a reducir las molestias frecuentes y el riesgo de enfermedades en la madre y el bebé.
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Durante el embarazo aumentan los requerimientos energéticos, proteínas, vitaminas y minerales. En ocasiones la dieta no es suficiente y es necesario recurrir a complementos.
Complementos más destacados recomendados para mujeres embarazadas y posparto:
- Ácido fólico. Nutriente esencial que interviene en la síntesis del ADN y las proteínas. Previene la espina bífida y otras consecuencias. 2 o 3 meses antes de concebir, se recomienda una dosis de 0,4 mg/día y una ingesta rica en folatos por aquellas mujeres sin antecedentes; si existen factores de riesgo para esta lesión (antecedentes, epilepsia en tratamiento con carbamazepina o ácido valproico, tratamiento con metotrexato, diabetes mellitus u obesidad) la dosis debe ser de 4-5 mg/día al menos un mes antes de la preconcepción , y durante, al menos los 3 primeros meses.
- Yodo. La OMS dictamina que el déficit de este elemento es la primera causa, después de la inanición extrema, de retraso mental y parálisis cerebral evitable en el mundo. Se trata de un nutriente esencial para la síntesis de hormonas tiroideas. En España, entre el 30 y 50% de las embarazadas no consume las dosis diarias de yodo recomendadas, con grandes variaciones según distintas zonas geográficas. Sociedades científicas recomiendan la suplementación con yodo durante todo el embarazo y la lactancia con 200 microgramos más de lo recomendado en población general (205-300 microgramos en total). Durante la lactancia es necesario continuar con estos complementos porque aumentan el coeficiente intelectual en más del 10% según el Sistema Nacional de Salud.
- Hierro. Deficiencia nutricional más frecuente en el embarazo, y en el segundo y tercer trimestre se puede dar un balance negativo en el que no se llegan a cubrir los requerimientos a través de la alimentación. Se recomienda durante este período 30 mg./día de hierro elemental, equivalente a 150 mg. de sulfato ferroso o 300 mg. de gluconato ferroso. En el caso de la lactancia, 15 mg./día.
- Calcio. La población española alcanza los niveles recomendados. Se recomiendan unos 1.000 mg./día (equivalentes a 3 raciones de lácteos). Alimentos y complementos que contienen calcio pueden reducir la absorción de hierro, por lo que conviene tomarlos por separado. Algunas formas galénicas de complementos multivitamínicos incluyen ambos nutrientes, que se liberan de forma separada. [/box]
Por lo general, elalimentación debe ser variada, equilibrada, fraccionada (como mínimo, 5 comidas al día), en horarios regulares, desayunos abundantes, beber un mínimo de dos litros de agua diarios, y comer alimentos frescos así como reducir los precocinados y enlatados.
Consejos de alimentación en esta presentación (PDF, vía FESNAD)
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