
“En el caso de las personas mayores, en la farmacia vemos a las mismas personas muy a menudo y detectamos enseguida cómo están, así como posibles cambios físicos, pérdida de peso, pérdida de memoria, si se están tomando bien o no la medicación, etc.”. Son palabras de la farmacéutica Cristina Sánchez, que este mes de febrero ha asistido a la sesión informativa en la sede colegial sobre el proyecto Radares. 161 farmacias participarán de forma voluntaria en este proyecto del Ayuntamiento de Barcelona, que tiene como objetivo detectar a personas mayores de 75 años que viven solas y que necesitan ayuda de cara a poder informar a los servicios sociales. La prioridad es reducir el riesgo de aislamiento y exclusión social.
"Los farmacéuticos interrelacionamos mucho con las personas y este conocimiento y el hecho de que la farmacia sea un lugar de encuentro son elementos que pueden aportar mucho de cara al proyecto Radares", añade la farmacéutica Núria Ribot. Jaume Reixach, por su parte, nos ha comentado que ya se había interesado previamente por el proyecto y que se ha apuntado "por la vertiente social y porque creo que debemos aportar nuestro papel sanitario y hacerlo más visible".
En la sesión informativa, que ha tenido lugar el 19 de febrero en el COFB, Montserrat Gironès, vocal de Ortopedia y representante del Colegio en el proyecto Radars, ha agradecido a los farmacéuticos que han asistido la gran acogida e interés por la iniciativa. “Nuestra participación refuerza el valor añadido del farmacéutico como agente de salud integrado en los barrios” comentó. Mª Assumpció Roset, comisionada de Alcaldía de las Personas Mayores del Ayuntamiento de Barcelona, añadió que el proyecto pone de manifiesto que “el farmacéutico se interesa por la calidad de vida y el aspecto social de su población de referencia”.
Rosa Rubio, como responsable del proyecto Radares en la ciudad de Barcelona, detalló los objetivos y tareas de las figuras de los “radares”, destacando la “mirada sensible y respetuosa hacia la gente mayor” y la necesaria complicidad del entorno para su éxito. "Se trata de un proyecto de acción comunitaria que necesita para desarrollarse de agentes que estén en el territorio".
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