Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte a nivel mundial. El electrocardiograma es una herramienta muy útil para realizar la detección precoz de estas enfermedades. Por otra parte, la técnica MAPA proporciona ventajas en la identificación, evaluación y seguimiento del paciente hipertenso. El conocimiento de estas dos técnicas puede posicionar al farmacéutico comunitario como un actor más en el cribado y seguimiento de las enfermedades cardiovasculares.
Para conocer la técnica MAPA, su lectura, aprender a interpretar un electrocardiograma (ECG) desde la farmacia comunitaria –y así poder dar respuesta a una consulta- o platear la posibilidad de ofrecerlos como un servicio, el COFB organizó una formación específica que tuvo lugar el pasado 26 de noviembre en la sede colegial. El profesorado del curso estuvo formado por Mariano De la Figuera, médico de familia del EAP Cerdeña de Barcelona, y Manel Rabanal, doctor en farmacia, miembro del Departamento de Fisiología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona.
“El farmacéutico comunitario, por su formación y cercanía a la población, es el profesional sanitario idóneo para colaborar en la detección precoz y seguimiento de las enfermedades cardiovasculares” explicó Manel Rabanal a lo largo del curso. También detalló que se establecen ocho etapas para poder interpretar e informar correctamente sobre un ECG y, en lo que se refiere a la principal intervención del farmacéutico comunitario, dijo que “consistiría en informar al paciente y, en caso de sospecha de alteración cardiovascular , elaborar un breve informe y derivar al paciente a su médico especialista”. Asimismo, puntualizó que “a partir de un manual básico sobre el ECG sería interesante y factible realizar esta prueba diagnóstica en las farmacias”.
“La técnica MAPA es imprescindible para el correcto manejo del hipertenso. Hay una discrepancia entre las indicaciones razonables de las guías y la práctica clínica, porque en estos momentos logísticamente no es posible”, comentó Mariano de la Figuera a lo largo de su exposición. “Es preciso combinar las técnicas AMPA y MAPA para optimizar la medida de la presión ambulatoria. Por ahora, sin embargo, falta investigación que valide los algoritmos que combinan estas dos técnicas” añadió.
“La técnica MAPA no está muy extendida pero puede aportar información de gran valor relativa al comportamiento de la hipertensión arterial en muchos enfermos, así como servir para ajustar correctamente el tratamiento” nos explica Mercè Barau, vocal del COFB y coordinadora de esta formación. “Uno de los puntos más innovadores del curso fue el conocimiento que se dio para poder interpretar un ECG de una forma sencilla, y el poder aprender a reconocer sobre el papel una serie de valores que nos permiten calcular desde la frecuencia cardíaca a el intervalo PQ y QT de gran importancia incluso para valorar el efecto secundario de ciertos fármacos”.
Esta formación era exclusiva para farmacéuticos comunitarios que hubieran realizado el curso “Las líneas estratégicas del Plan de Salud: implicaciones para la farmacia comunitaria”, edición 2013 – 2014.
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