El pasado 19 de febrero, el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona (COFB) organizó la formación "Dermonalizadores en el consejo farmacéutico", con el patrocinio de Microcaya. La sesión, con plazas agotadas, fue impartida por Gema Herrerías, farmacéutica titular de A5 Farmacia y CVO-Fundadora de gh Gema Herrerías, y por Maite Albizua, farmacéutica del departamento científico de Microcaya. Marta Alcalde, vocal de Dermofarmacia y Productos Sanitarios del COFB, coordinó la formación.

Los objetivos de la formación, dirigida a farmacéuticos y farmacéuticas comunitarias, fueron establecer las bases de los protocolos del consejo dermofarmacéutico, revisar las herramientas para implementar protocolos de consejo dermofarmacéutico, conocer el funcionamiento y uso de los dermoanalizadores y dar el mejor consejo y realizar correctamente la recomendación dermofarmacéutica.
Durante la formación se habló, en una primera parte, sobre “el consejo dermofarmacéutico y cómo implementar este servicio en la farmacia comunitaria”, indicó Alcalde durante su presentación. Y, en una segunda parte, se explicó cuál es el funcionamiento de los dermonanalizadores y cómo pueden ayudar a la hora de hacer recomendaciones desde la farmacia comunitaria.

Consejo dermofarmacéutico en la farmacia comunitaria
¿Qué hacer desde la farmacia comunitaria? La formación constó de una primera parte teórica en la que Gema Herrerías, farmacéutica titular de A5 Farmacia y CVO-Fundadora de gh Gema Herrerías, explicó cómo implementar el servicio de dermofarmacéutico en la farmacia comunitaria.En este sentido, Herrerías recomendó disponer de un espacio específico para poder ofrecer este servicio profesionalizado En cuanto al servicio, especificó que se basa en un circuito de seis pasos: solicitud de cita y formalización de inicio del servicio profesional, entrevista farmacéutica para explorar de forma detallada el motivo de consulta, estudio farmacéutico con la realización de un análisis de la piel mediante diferentes métodos, actuación farmacéutica haciendo una propuesta de rutina personalizada según el código de piel y revisión, registro del procedimiento y revisión en consultas posteriores.

En caso de que el cosmético genere un efecto no deseado, la farmacéutica recomendó identificar la reacción y poner en marcha un protocolo de reexposición hasta que desaparezcan los síntomas de eritema o prurito.
A continuación, la farmacéutica compartió diferentes casos prácticos que se pueden presentar en la farmacia comunitaria, así como los protocolos de recomendación, para casos de acné, dermatitis perioral, rosácea, fondo rosa, lupus, melasma, hiperpigmentación inflamatoria, lentigo solares.
Manejo de los dermonalizadores
En la segunda parte de la formación, Maite Albizua, farmacéutica del departamento científico de Microcaya ofreció una parte práctica para la utilización de los dermoanalizadores para la piel y capilares. Albizua mostró una parrilla en la que se detallaban todas las características que permiten analizar los dermoanalizadores (grasa, hidratación, biomecánica, melanina, TEWL, pH, temperatura, brillo, suavidad, color y deformación), las características para medir, el método de medición, las sondas y el equipo empleado.

¿Qué obtenemos con los dermoanalizadores? La farmacéutica indicó que gracias al análisis que ofrecen estos aparatos, permite ofrecer un servicio profesional complementario para la salud, fidelizar al cliente y apoyo a la experiencia con un equipo que reafirma el criterio profesional.
Por último, Albizua expuso diferentes buenas prácticas para tomar medidas y diferentes casos prácticos en los que se hicieron uso de los dermoanalizadores.
Con el patrocinio de:
