En mayor o en menor medida, los medicamentos han estado, están o estarán presentes en nuestra vida. Dependiendo de las necesidades de cada uno, se hará uso más o menos esporádico, pero es importante tenerlos al alcance para resolver las diferentes patologías que pueden surgir al día a día o para mejorar la adherencia de enfermos polimedicados , entre otras cuestiones. Por tanto, son muy cercanos a todos nosotros pero, ¿tenemos constancia de qué manera, cómo y con qué pueden interactuar? ¿Entendemos qué significa?
Se habla de interacción cuando un fármaco no ejerce el efecto esperado debido a la presencia de un alimento o de otro medicamento y, en consecuencia, se modifica su eficacia. Sin embargo, esta influencia no tiene por qué ser siempre negativa, que también, ya que, al igual que puede impedir su absorción, también puede favorecerla. Por tanto, es fundamental que como paciente se sepa la medicación que se toma, para qué sirve, cómo ingerirse en relación con las comidas y cuáles son los posibles efectos, si existen, si se le administra más de un medicamento, es decir, saber cuáles son los fármacos que pueden tomarse juntos y cuáles solos.

- “En ayunas” significa que la medicación debe tomarse al menos una hora antes de comer o dos horas después de haber terminado.
- Cuando se indica “con las comidas” significa durante la comida o justo después de comer.
- En todos los casos debe evitarse el consumo de bebidas alcohólicas.
- Hay que tener en cuenta que las interacciones entre alimentos y medicamentos van en ambos sentidos, es decir, existen fármacos que pueden impedir la absorción de alguno de los nutrientes de los alimentos. Por ejemplo, el uso continuado de laxantes puede impedir la absorción de vitaminas liposolubles o el consumo habitual de café o té en grandes cantidades puede impedir la absorción de hierro, entre distintos ejemplos.
Las interacciones son muy variadas y pueden oscilar desde aumentar la toxicidad de un medicamento al ingerirlo con determinados alimentos, hasta anular su efectividad al tomarlo con otros.

Debe tenerse en cuenta que, a medida que aumenta el número de medicamentos que el paciente debe tomar, se incrementa la posibilidad de interacciones. De esta manera, debe estar especial alerta con el paciente polimedicado, como los enfermos crónicos o la gente mayor, ya que, en la mayoría de casos, se les receta más de un fármaco.
Sobre todo en el caso del segundo grupo, puesto que se trata de uno de los segmentos de la población más vulnerables ante cualquier enfermedad y con mayor riesgo de presentar problemas derivados con los medicamentos. Por eso, hay que tenerlos presentes y evitar problemas de adhesión a la medicación, dificultad que el farmacéutico puede promover a prevenir con los Sistemas Personalizados de Dosificación (SPD), un blíster personalizado donde indica al paciente en qué momento del día debe tomarse el medicamento.
- Las probabilidades de interacción entre medicamentos son bajas, pero no pueden obviarse, por los riesgos que puedan comportar.
- Algunos medicamentos pueden interaccionar también con alimentos o plantas medicinales.
En caso de que se tenga cualquier duda, el farmacéutico puede aconsejarle y ayudarle como experto en el medicamento.
¿Influye lo que comemos en nuestra medicación? (vía Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos)
Fuente y más información:
- Medicamentos y alimentos. Interacciones (vía Farmaceuticonline, nuestra web de salud)
- Medicamentos. Interacciones (vía Farmaceuticonline)
- Personas mayores y medicamentos (vía Farmaceuticonline)
- Alimentos que interaccionan con medicamentos: ¿qué se debe tener en cuenta? (Blog)