Artículo de Aina Surroca Rebés, farmacéutica comunitaria, vocal de la Junta y responsable de la Comisión de Formación Continuada del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona.
"Nuestra proximidad hace de la farmacia un punto frecuente de consultas sobre la salud, por lo que podemos acompañar con consejos sobre el cuidado infantil a los padres, familiares o cuidadores desde el nacimiento del bebé."
Entendemos como pacientes pediátricos aquellos pacientes de entre 0 y 18 años que, de forma clásica, se agrupan según la edad de esta forma:
1. Recién nacidos: de 0-28 días.
– Prematuros: edad gestacional inferior a 38 semanas.
– A plazo: edad gestacional de 38-42 semanas.
2. Lactantes: 29 días-1 año.
3. Niños preescolares: 1-5 años.
4. Escolares: 5-13 años.
5. Adolescentes: 13-18 años.
El paciente pediátrico presenta unas peculiaridades fisiológicas cambiantes en función de su edad y grado de desarrollo, por lo que puede requerir, entre otros aspectos, deenfoques terapéuticos específicos, formas farmacéuticas concretas y ajustes de la posología.
Por lo general, los medicamentos disponibles en el mercado son los que se han autorizado por adultos con las recomendaciones oportunas indicadas en ficha técnica y prospecto respecto a las dosis pediátricas, aunque existen presentaciones y formas farmacéuticas exclusivas de uso pediátrico.
El papel de la farmacia comunitaria en consultas relacionadas con el paciente pediátrico
En la farmacia comunitaria recibimos con frecuencia consultas relacionadas con la salud infantil, sea de síntomas menores o problemas de baja complejidad, como la intervención y dispensación de medicamentos prescritos por el médico pediatra o cualquier otro especialista que trate a un paciente pediátrico.
Nuestra cercanía hace de la farmacia un punto frecuente de consultas sobre la salud, por lo que podemos acompañar con consejos sobre el cuidado infantil a los padres, familiares o cuidadores desde el nacimiento del bebé.
Como en cualquier dispensación, deberemos asegurarnos para quién es el medicamento, cómo debe tomarlo, cuánto tiempo y para qué sirve. La comprobación de las dosis según el peso del paciente y la idoneidad de la forma farmacéutica son elementos clave en la atención farmacéutica en pediatría. Respecto a cómo tomar el medicamento, obviamente no podemos interactuar directamente con el niño de poca edad, pero a medida que su edad lo permita, podemos procurar que, junto a sus padres, se familiarice con su tratamiento farmacológico, o bien realizar actividades para fomentar estilos de vida saludables y cuidando de la salud.
En relación con el paciente pediátrico, es especialmente relevante conocer los criterios de derivación y, en general, a menor edad del niño, más preocupaciones deberemos tener en caso de duda frente a la consulta que se nos plantee. El uso de protocolos concretos y actualizados resultará de gran utilidad.

Consultas frecuentes en la farmacia
Las consultas relacionadas con la población infantil son muy diversas y podríamos clasificarlas de diferentes formas: por grupos terapéuticos implicados, por patología o aparato implicado, para edad del paciente, por sintomatología, etc. En cualquier caso, destacamos las siguientes consultas por su frecuencia:
Fiebre y dolor – Analgésicos y antipiréticos en pediatría
La dispensación de paracetamol o ibuprofeno en formas farmacéuticas pediátricas para combatir la fiebre o el dolor es muy frecuente, ya sea por la prescripción directa del médico al tratar algún proceso inflamatorio o la necesidad de controlar un aumento de temperatura corporal secundario a un proceso infeccioso.
Aunque existen presentaciones pediátricas que no requieren receta médica, en estos casos es importante, por un lado, destacar que no se puede abusar; y, por otra, informar a los padres que no deberían utilizarlos sin el consejo del profesional sanitario. También es importante asegurarnos en el momento de la dispensación de que se conoce la dosis y que se calcula en función del peso del niño.
Patologías relacionadas con el aparato respiratorio
Las infecciones relacionadas con ORL y con el aparato respiratorio representan lo principal motivo de consulta en atención primaria. Pueden ser de componente vírico, sobre todo en niños menores de 5 años, y altamente prevalentes en menores de 2. Si se nos consulta, es imprescindible que conozcamos los criterios de derivación y sólo se recomienden medidas no farmacológicas o tratamientos sintomáticos que no requieran prescripción médica. Al igual que cuando la consulta es de un adulto, cabe destacar que el uso de antibióticos no es efectivo en infecciones víricas y que debemos fomentar su uso racional para evitar resistencias.
También es frecuente que los padres acudan a la farmacia después de consultar con el médico, por lo que en este caso reforzaremos los aspectos más importantes a conocer del tratamiento prescrito y podremos recomendar medidas complementarias y/o no farmacológicas.
Primeros cuidados del bebé, lactancia y alimentación infantil
La llegada del bebé puede provocar dudas en sus cuidados generales – especialmente en padres tempranos – y la farmacia puede ser, además del pediatra de referencia, uno punto de consulta de las cuidados básicos del bebé.
También existen consultas sobre productos de alimentación infantil, sean leches de fórmula u otros productos disponibles en la oficina de farmacia. Otro ámbito relacionado con la pediatría del que pueden consultar en la farmacia es el del uso de fármacos durante la lactancia materna con el fin de resolver dudas sobre la idoneidad o compatibilidad de estos tratamientos.
Patologías relacionadas con la piel – cuidado de la piel infantil
La cuidado de la piel, así como patologías relacionadas, son motivos frecuentes de consulta. Aunque no exista ninguna patología, la piel infantil requiere productos y cuidados específicos, puesto que hasta aproximadamente los 6 años todavía no ha madurado completamente y es más delgada, con un efecto barrera más limitado.
Por ejemplo, durante la infancia también puede debutar la atopia, dermatitis atópica a nivel cutáneo, manifestaciones que pueden ser motivo de consulta. Una vez realizado el diagnóstico por parte del dermatólogo, desde la farmacia podemos ayudar al seguimiento del paciente pediátrico. Otras consultas frecuentes en el ámbito cutáneo son las picaduras de insectos o dermatitis de diferente índole que gestionaremos en función de cada caso.
Parásitos en edad escolar
Con el inicio de la etapa escolar, la consulta sobre el tratamiento de parásitos capilares –piojos– es muy habitual en la farmacia. Disponemos de diferentes alternativas comercializadas y podremos elegir, en función del caso, formados por piel atópica o sensible, tipo de cabello, etc., además de fomentar la importancia de un segundo tratamiento al cabo de 8 días coincidiendo con el ciclo vital del parásito.
No es infrecuente la consulta sobre síntomas relacionados con parásitos intestinales, también habituales en esta edad. Es este caso, las alternativas terapéuticas requieren prescripción médica y deben remitirse al pediatra para su valoración.
Otros
Existen, además de las anteriores, diferentes ámbitos vinculados a la pediatría sobre los que pueden llegar consultas a la oficina de farmacia, como por ejemplo, preguntas relacionadas con el sistema nervioso central; insomnio infantil, ansiedad, enuresis nocturna, trastornos de déficit de atención e hiperactividad; sistema endocrino, como elobesidad, trastornos de crecimiento, etc. En cualquier caso, ya sea si estas consultas están asociadas a una dispensación concreta o se trata de una pregunta más general, siempre remitiremos a los especialistas de referencia en caso de que se cumplan los criterios de derivación que marquen los distintos protocolos de actuación farmacéutica.
Importancia de la formación y actualización
Como en cualquier otro ámbito de actuación en la farmacia, la formación y constante actualización son fundamentales para asegurar un consejo y una atención farmacéutica de calidad.
Conscientes de esta necesidad y respondiendo a las particularidades del paciente infantil, desde Àgora Sanitària hemos impulsado un curso titulado “Consultas frecuentes en pediatría” con el objetivo de revisar las principales consultas relacionadas con la salud infantil que se nos plantean a diario en la oficina de farmacia, proporcionando al farmacéutico las herramientas y los conocimientos para realizar la atención farmacéutica correcta a los padres y madres que consultan sobre la salud de sus niños.
Se trata de un curso de 15 horas, estructurado en 5 módulos. El primero contextualiza las particularidades del paciente pediátrico en relación a la edad, etapas, farmacodinamia, dosis, excipientes y seguridad de los tratamientos en pediatría, entre otros, para, en el resto de módulos, entrar en detalle en todas las áreas de consulta frecuentes. Además, cuenta con un foro de consultas a expertos y casos prácticos para fomentar el aprendizaje.