Este lunes 25 de septiembre se celebra el Día Mundial del Farmacéutico, una conmemoración organizada por la Federación Farmacéutica Internacional (FIP) que tiene como lema "De la investigación a la asistencia sanitaria: el farmacéutico a su servicio".
Con este mensaje se ha querido incidir en las aportaciones de la profesión farmacéutica a la salud desde los distintos ámbitos de ejercicio de la profesión y destacar la labor que se realiza desde la proximidad y accesibilidad de la farmacia comunitaria.
También se ha querido reconocer la participación del farmacéutico en los procesos de reconocimiento de los problemas de salud, la investigación, el desarrollo de nuevos medicamentos y la formación de futuros profesionales de la salud.
Profesión farmacéutica
En la provincia de Barcelona hay más de 8.600 farmacéuticos que trabajan desde los diferentes ámbitos de ejercicio de la profesión por mejorar la salud y el bienestar de las personas. La colaboración entre los diferentes profesionales del sector también ha quedado recogida en los materiales que ha diseñado el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos con motivo de esta efeméride: cartel para los farmacéuticos, uno vídeo conmemorativo y imágenes para compartir en las redes sociales con el hashtag #dmf2017.
Las aportaciones del farmacéutico a la sociedad se enmarcan en los varios servicios que se ofrecen en las farmacias en colaboración con otros profesionales sanitarios, entre los que destacan: Programas de reducción de daños: Y también: La farmacia en Cataluña ¿Cuántos colegiados hay en Cataluña? El número de farmacéuticos en Cataluña se ha ido estabilizando en los últimos tres años, así para el año 2016 el número total es de 10.955, un 1,70% más que el año anterior: 8.695 en la provincia de Barcelona, 886 en Gerona, 839 en Tarragona y 535 en Lérida. ¿En qué ámbitos ejercen? 7.100 (el 64,81%) desarrollan su labor profesional en alguna de las 3.182 faromacias del territorio, lo que supone una media de más de 2 farmacéuticos por oficina de farmacia. Asimismo, un importante porcentaje de colegiados desarrollan su actividad profesional en ámbitos no exclusivos para los farmacéuticos, como es el caso del ámbito de la salud pública, análisis clínicos, industria y distribución farmacéutica. Por otra parte, la adscripción de los farmacéuticos a las diferentes vocalías de los Colegios remarca el interés profesional específico en algunas áreas como son la dermofarmacia, la alimentación y nutrición, la fitoterapia, el orotopédia y la investigación y docencia que pueden desarrollarse desde diferentes formas de ejercicio de la profesión. ¿Qué perfil predomina? El perfil del licenciado en farmacia es femenino – ya que representan el 73% de colegiados – y, en cuanto a las edades, la franja de edad donde se concentra un mayor número de colegiados en Cataluña es la que va de los 35 a menos de 45 años, seguida de la de 45 a menos de 55 años y la de menos de 35 años. También se observa una feminización progresiva de la profesión, puesto que el número de mujeres aumenta hasta un 78% sobre el total de farmacéuticos colegiados en la franja de edad de menos de 35 años, mientras que en la de a partir de 65 años, hay un 51,99% de mujeres y un 48,01% de varones. Una de las características distintivas de la farmacia es su distribución, ya que gracias a criterios geográficos y demográficos recogidos en la legislación, se garantiza que el 99% de la población disponga de una farmacia en la que vive. Elextensa red farmacéutica de Catalunya -3.182 oficinas de farmacia y 113 botiquines-, hace que la ratio de farmacias para la población catalana sea de las más altas de Europa. Concretamente en Cataluña, existe una oficina de farmacia por cada 2.350 habitantes y 1 farmacéutico comunitario por cada 1.053 habitantes, aproximadamente, en el año 2016. Otras ediciones del Día Mundial del Farmacéutico recogidas en el Blog: Para más información, puede consultar Portalfarma.
La distribución de las farmacias en Cataluña responde a la necesidad de asegurar un servicio farmacéutico cercano al ciudadano de forma equitativa y de fácil acceso para todos, evitando, de este modo, la concentración en lugares más poblados o urbanos en detrimento de la población que vive en sitios más rurales o de poca concentración. Su ubicación depende del número de habitantes por área básica y contempla la distancia mínima entre éstas para llegar a todos los núcleos poblacionales.
Cataluña fue la primera Comunidad del Estado que tuvo una Ley de Ordenación Farmacéutica propia (Ley 31/1991), aprobada por unanimidad de todo el Parlamento de Cataluña.