Gracias al uso de aparatos dermonalizadores como complemento a la dispensación de cosmética y productos dermofarmacéuticos se puede hacer una recomendación más profesional y personalizada al cliente, a la vez que aporta dinamismo e innovación a la farmacia. Por estos motivos el Colegio organizó el 24 de abril el curso “¿Podemos mejorar el consejo dermofarmacéutico con dermoanalizadores?”, coordinado por Núria Bosch, vocal de Dermofarmacia y Productos Sanitarios.
"El uso del dermoanalizador permite un mayor grado de profesionalización a través de esta herramienta con indicadores validados de los parámetros de hidratación, elasticidad, suero y pigmentación de la piel. También permite personalizar más el consejo dermocosmético dentro de la oficina de farmacia y realizar un seguimiento del resultado obtenido a través de este consejo".
El curso, patrocinado por Microcaya y Davi&Cia, ofreció en primer lugar una parte teórica en la que Rosa Puig, farmacéutica comunitaria de Sant Joan Despí, dio una visión profesional del consejo cosmético en la farmacia, aspectos comerciales para mejorarlo y las ventajas de utilizar dermoanalizadores. A continuación, Esteve Rodríguez, director comercial de Davi&Cia, junto a Marta Sanz y Miren Arana, formadores de Microcaya, impartieron un taller con dos de los aparatos dermonalizadores existentes explicando y demostrando las bases técnicas de los productos con el fin de conocer la fiabilidad y precisión de los productos comercializados.