Llegan las vacaciones y también el momento de irse de viaje. Aparte de pensar todo lo que llevarás en la maleta, antes de que te vayas de viaje es recomendable que hagas una visita al médico para que evalúe tu estado de salud. Es importante que estés seguro de que dispondrás de medicamentos – sobre todo si estás tomando alguno – y de un seguro médico adecuado al tipo de viaje. Además, puedes consultar a cualquiera centro internacional de vacunación cuáles son las vacunas necesarias para viajar a tu destino.
Cuando hagas la maleta, asegúrate de llevar ropa adecuada para cada destino. Aparte de las gafas de sol, el gorro y la protección solar total, es recomendable que lleves ropa de fibras naturales como el algodón o el lino, debido a su ligereza y comodidad. Procura que tu calzado te cubra el pie, que sea ancho – para evitar las ampollas por fricción – y de material transpirable. Y lleva siempre un par de repuesto. En el avión procura vestir con ropa cómoda que facilite la circulación.
A la hora de desplazarte, recuerda estos consejos para evitar la síndrome de la clase turista, es decir, las consecuencias de viajar sentado en la misma posición durante mucho tiempo: mueve las piernas y los brazos de forma regular. Puedes realizar pequeños ejercicios, como levantar la punta del pie de forma enérgica y mover los dedos durante unos segundos, apoyando el talón en el suelo. También es recomendable que te levantes de vez en cuando, que evites dormir en posiciones incómodas y que bebas abundante agua.
Cuando llegues a tu destino, recuerda extremar las medidas higiénicas y vigilar tu alimentación. Bebe siempre agua envasada y, en determinados países, evita comer alimentos crudos o semicocidos y fruta sin pelar.
